Santa Bárbara virgen y mártir nació, según la tradición, en Anatolia
(actual Turquía) a comienzos del siglo III; de joven se convirtió al
cristianismo por lo que fue encerrada en su castillo por su padre
Dióscoro, que era pagano, para forzarla a la apostasía; al no
conseguirlo, le infligió toda clase de maltratos y torturas hasta
terminar decapitándola personalmente, momento en el
que, en castigo a su maldad, fue fulminado por un rayo, que algunos
relatos hacen que destruya, además, la torre en la que estaba presa la
Santa.
Su festividad se celebra hoy, día 4 de diciembre, a pesar de que fue
´jubilada´ del Santoral católico en 1969 por el Concilio Vaticano II
convocado por el Papa Juan XXIII, al considerar que no había suficientes
pruebas documentales que justificaran su ´Hoja de Servicios´ como tal.
Pero la realidad es que Santa Bárbara es una de las santas cristianas
(es decir, tanto para católicos como para protestantes y ortodoxos) más
universales y populares. Y ello se aprecia, entre otras razones, por la
advocación de numerosas profesiones que se acogen a su patronazgo, casi
unánimemente a nivel mundial.
Entre ellas podemos citar a los mineros, a los ingenieros de minas, a
cuantos trabajan en la preparación de explosivos o la fabricación de
armas de fuego (como es el caso de los ingenieros politécnicos españoles
en su rama de armamento), a algunas marinas como la italiana, a un gran
número de los cuerpos de bomberos como los de Francia y de Italia, de
algunas poblaciones españolas y de la mayoría de las naciones de
Iberoamérica, así como, por supuesto, a la casi totalidad de los
artilleros del mundo cristiano e incluso de algunos países musulmanes.
En otro orden de ideas, también es interesante conocer qué dice la
tradición sobre dónde se encuentra el sepulcro de la Santa. Sobre ello
hay distintas versiones, todas ellas referidas a Italia, que afirman que
están en la capilla de Santa Bárbara de Piacenza inaugurada por el rey
Víctor Manuel III en 1928, o en Venecia en la iglesia de San Martino en
la isla de Burano, o en la catedral de Rieli o, finalmente, en la
basílica de Santa Bárbara de Mantua.
La virgen se encuentra en su ermita situada a las afuera del pueblo
durante todo el año, y una semana antes de su fiesta se baja a la
Iglesia para hacerle el triduo, que son los tres días antes de la
celebración de su fiesta. En ese día se le hace una misa romera y a
continuación se le saca en procesión por las calles del pueblo, donde es
muy aplaudida, a la salida de la iglesia y a su llegada a la ermita,
donde se le toca el pasodoble de Santa Bárbara. Después de la procesión
la hermandad de Santa Bárbara ofrece una comida para todas las personas
que deseen colaborar con dicha hermandad,la comida suele ser menú
típicos del pueblo, como potajes o sopas y a continuación carne un
postre y el tradicional café con dulces hechos por las mujeres de la
hermandad. Y ya para que la comida no te haga mucho estrago pues también
hay un baile amenizado por unos cuantos chavales de la banda que han
venido a la procesión y luego animan a la gente para bailar y pasarse un
rato agradable, hasta ya entrada la noche. Y para que todo esto
funcione bien y las fiestas salgan lo mejor posible se encargan de todos
la directiva de la hermandad de Santa Barbara, que en estos días y unas
semanas antes trabajan durante todo el día.
Felices fiestas le deseas www.samanensesausentes.com