Olga Severino, encabezando una comisión perteneciente a la Fundación Lluvia de Bendiciones, que lucha por los derechos de personas con VIH-Sida denunció este lunes el maltrato al que, alegadamente, son sometidos los reclusos que padecen de esa condición en la cárcel de Samaná.
Tanto Olga como Saturnino Green y Paula Flores, representantes de la fundación en Sánchez y Juana Vicenta, imploraron a las autoridades de la cárcel pública de Samaná para que permitan a los internos el derecho a la salud, que según denunciaron, les ha sido violado al permitir que varios pierdan la vida a causa del virus en las últimas dos semanas.
Las alegadas razones de muertes en el referido recinto penitenciario son atribuidas, además del nivel de hacinamiento, a las trabas impuestas por las autoridades civiles y militares que esperan el último momento para llevar a los enfermos ante los centros de salud, agregaron.
Sobre este grave problema humano, el doctor Humberto Ortega, director del hospital Leopoldo Pou confirmó los decesos recientes a causa de edema pulmonar y enfermedad diarreica y manifestó el interés del Ministerio de Salud en habilitar una unidad para cuidados especiales en la cárcel para lo cual sólo requieren de un permiso que debe expedir la Dirección Nacional de Prisiones.
A su vez, la doctora Katherine Pérez, encargada del Programa de Control de la Tuberculosis, dijo que el MSP encara la situación y tramita la autorización.