Los residentes en el sector se quejan de la poca vigilancia policial, que se traduce en una zona insegura.
El joven Joel de Los Santos Almánzar, de 16 años, fue ultimado
alegadamente de un tiro en el costado por un amigo suyo, identificado
por los vecinos como Edward, de 20 años, quien por motivos pasionales le
cegó la vida.
Los familiares de la víctima claman por justicia.
Narran que desde diciembre suman tres los muertos a mano de antisociales, en la calle Mamá Tingó, del sector La Esperanza.
Esto sucede, según los munícipes, debido al mínimo patrullaje policial y por tal motivo sienten temor de salir a las calles.
Expresan que a pesar de ser un sector pequeño, la
comunidad de la Esperanza alberga cientos de familias y aspiran a
agentes policiales hagan su trabajo para que retorne la seguridad y no
se continúen produciendo hechos lamentables.
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