La azafata avisó al encargado de mantenimiento y cuando lograron abrir el servicio
 se encontraron con un dantesco espectáculo: un bebé nonato de apenas 
veinte semanas yacía en los baños del avión.
"La autopsia de esta mañana mostró que la causa de la muerte fue un
 aborto involuntario", confirmaron fuentes judiciales, que descartaron 
el asesinato: "La tesis del infanticidio ha sido abandonada", revelaron a
 la agencia France Presse. Aún no se ha encontrado a la madre.
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El avión de Air France se encontraba en el aeropuerto de 
Rosilly-Charles de Gaulle, tras llegar de Abidjan (Costa de Marfil) y 
tenía previsto partir a Dubai, sin embargo el macabro hallazgo retrasó 
el vuelo más de seis horas, tal y como confirmó Air France, aunque sin 
especificar los motivos

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